La Remolacha En Primavera

¡Hola! Como estás…espero que bien. Que estés con mucho ánimo y ganas de cuidarte.

Yo vengo en ésta ocasión a hablarte de la “remolacha, beterraga o betabel”.  Una hortaliza estupenda para ser consumida en primavera.

De la remolacha se utilizan, tanto los tubérculos o raíces, como las hojas. Son una verdura maravillosa para ser consumida en ésta época primaveral. Debido a sus valiosos aportes a tu salud y especialmente tu hígado y vesícula biliar. Que como bien sabes, vengo contándote en mis últimos post. Se activan en primavera, como órganos de transición, de cambio y de la preparación para el verano.

¡¡¡ Te cuento, todo lo que la remolacha puede hacer por ti!!!

• Te limpia el hígado y la sangre. Te recuerdo que el hígado es uno de los órganos donde se fabrica la sangre. Por ello, gracias a los antioxidantes de la remolacha, como son la vitaminas A y C. Te ayuda a purificar la sangre, a la vez que limpia también el órgano, manteniéndolo más sano y con más.
• Te fortalece el corazón y calma el espíritu. La remolacha te ayuda a tener el sistema circulatorio estable, te amplia las arterias y te disminuye la presión arterial. Y favoreciendo que tengas una mente más en calma, mejor descanso y mejor calidad en el sueño.
• Tiene acción antioxidante y anti inflamatoria. Gracias a sus componentes como son la betalaina y la betacianina, te evita tener el sistema digestivo inflamado, además de brindar lubricación a tus intestinos, impide que el colesterol se adhiera a las arterias. Y también evita la proliferación de células cancerosas.
• Aporte calórico muy bajo, te ayuda a controlar el peso. Sólo tiene 35 kilocalorías por cada 100 gramos consumidos. Con lo cual, es un alimento estupendo para que incorpores en tu dieta, si  presentas sobrepeso, si tienes obesidad o deseas  mantener tu peso estable.
• Te aporta vitaminas A, C, y B9 (ácido #fólico). Un alimento indispensable para las embarazadas. Gracias a sus aportes en ácido fólico, que es un componente esencial para la correcta formación de la médula espinal en el bebe. Protege al feto de malformaciones, como es la espina bífida. Y también ayuda a mitigar los problemas de anemia, ya que estimula la producción de glóbulos rojos. Y gracias a sus aporte en  vitamina C se hace posible la mejor absorción del hierro.
• Te suministra minerales como el magnesio y el potasio. Gracias a los aportes en magnesio, puedes tener una musculatura más fuerte y elástica. Además de ayudarte a mantener una energía mas estable, reducción del cansancio y la fatiga. Y gracias a los aportes de potasio, el sistema muscular se ve muy favorecido, mejora la circulación de nutrientes a nivel celular y a expulsar desechos de las mismas.
• Rica en silicio, para formación de uñas, músculos, tendones y cartílagos. El consumo de remolacha, en lo posible cruda, es muy beneficiosa, puesto que el azúcar que te aporta, contiene silicio. El silicio te aporta firmeza y elasticidad a los tejidos. Lo que al final se traduce en el buen funcionamiento de los músculos, tendones. Etc. Y es que el silicio tiene una estructura cristalina como el “cuarzo”, lo cual le confiere la propiedad de entrar en tus tejidos y limpiarlos de las toxinas almacenadas.

¿Necesitas mas razones para incorporarla en tu dieta ésta primavera?

Yo creo que no, ¿verdad?. La remolacha, toda ella en si misma, es tan sencilla pero tan valiosa a la vez. Con su color tan penetrante, con su sabor tan maleable. Que a nada que le pongas algún buen ingrediente más, te hace quedar como todo un expert@ en la cocina. Yo creo que si aún no las ha probado o no la conoces. Es momento de que lo hagas.

Estoy convencida que la “Madre Naturaleza” lo tiene todo perfectamente diseñado y calculado. Para darnos en el momento preciso, los alimentos que debemos consumir.

En verdad creo que sólo busca llevarnos casi de la mano por la vida. Brindándonos la posibilidad de alimentarnos de forma sencilla, pero sana.

Así que creo que ahora te toca a ti, elegir como quieres hacerlo.

Como siempre, si te ha gustado, compártelo, porque sólo así podremos ser “nosotros mismos” el cambio que queremos ver en los demás.