Quiero empezar, citando textualmente la frase de Marianne Costa y Alejandro Jodorowsky, en su libró “Metagenealogía”…Dice así:
“Es imposible conocernos a nosotros mismos, si no conocemos el legado material y espiritual de nuestro árbol genealógico”.
Pareciera que hoy día, por suerte, gran parte de la humanidad está tomando consciencia de la importancia de conocer su árbol genealógico.
Gracias a los valiosos estudios realizados por Anne Ancelin schützenberger, Maria Torok o Marianne Costa, se ha podido establecer, como el inconsciente colectivo, clan o familia, influye de forma notable, sobre el inconsciente individual.
Y cómo, cuándo el individuo, toma distancia de forma objetiva de todo lo que su gran familia le ha heredado. Es capaz de superar la gran mayoría de los problemas que lleva arrastrando, en ocasiones desde la infancia.
De hecho, los estudios realizados, sobre la fuerte y directa relación entre el individuo y su clan, han establecido que:
- El ser humano, encierra lo reprimido y lo olvidado
- El clan guarda los símbolos comunes del grupo o la comunidad
Por acá, te voy a dejar el link del vídeo…si prefieres oírme, mientras haces algo más…Dale al play:
Secretos, mitos y tabúes que destruyen la vida de sus propios miembros
Todos pertenecemos a una familia determinada, mas grande o mas pequeña. Pero, sin excusa alguna todos sabemos que la mayoría de nuestras familias guardan secretos y siguen un sistema de creencias.
En muchas ocasiones, ese sistema de creencias ha formado una especie de entramado o red impenetrable. El cual, es transmitido de generación en generación. Y como si de una especie de “ley no escrita” se tratara, se ha ido cumpliendo por todos los miembros del clan.
Casi siempre, este entramado está apoyado en figuras de autoridad dentro del clan. Y que lo hacen saber a los demás, en forma de:
- Amenazas permanentes
- Secretos que deben seguir guardados
- Violaciones, abortos, incestos
- Violencia hacia los miembros más cercano
- Muertes dentro del mismo clan
- Robos por celos entre miembros del clan
- Acuerdos, mandatos y promesas,
- Enfermedades repetitivas o vergonzantes
Sometiendo a todo el clan a cumplirlos y traspasarlos. Y todo ello, bajo coacción de no ser repudiados o excluidos del clan. Y de perpetuar el clan, la fuerza, el buen nombre, el que dirán, las apariencias, etc.
Es así, que este “inconsciente colectivo” transmite su influencia de generación en generación. Y muchos de sus miembros, lo reviven una y otra vez, así:
- Traumas
- Recuerdos reprimidos
- Creencias y mitos
- Desgracias
- Enfermedades
- Pobreza
- Pérdidas económicas, personales, etc
- Rivalidades incomprendidas, celos, manías
«Verdad es lo que es útil en un momento dado, en un lugar dado y para un ser dado”
Y si alguno se atreve a desafiar a la “gran familia”, puede ser repudiado, penalizado con ser desheredad@, visto como la oveja negra de la familia, el rebelde sin causa, el rarito, el que no ha querido seguir la tradición familiar en el mismo trabajo, estudiar la misma carrera, etc.
Por suerte – como decía al principio – la sociedad ha cambiado. Y muchos miembr@s que han tomado consciencia de la influencia dañina por parte de sus clanes, han decidido girar 180º e ir al fondo de la verdad.
Muchos seres humanos están recorriendo su propio camino. Sanando heridas del pasado, cortando lazos limitantes y deshaciendo creencias ilógicas.
De ahí, que sea muy importante conocer nuestro árbol familiar. Para poder ser nosotros mismos y para poder poner luz, a todos los episodios oscuros o ensombrecidos en la vida de nuestros antepasados.
«El árbol genealógico puede ser un tesoro que nos hace crecer en consciencia, gracias a los logros y éxitos que encierra o puede ser una trampa que nos mantiene atrapados en sus fracasos”.
Nosotros mismos somos nuestro árbol, de ahí, que no sólo arrastremos una herencia genética, sino también energética.
Y es por ello, que cuando nos adentramos en la estructura del árbol familiar, él se abre en todas sus ramas. Como si de un verdadero árbol se tratara.
No es siempre fácil, pero la vida misma pone los medios para descubrir fortalezas y debilidades del clan, historias que se repiten y miles de situaciones que no dejarán de sorprenderte.
Cuando trabajas con el árbol familiar, compruebas como las “casualidades” no existen y si en muchos casos las “causalidades”.
Y que cuando deshaces los “nudos” del árbol familiar”, eres es libre. Y la vida fluye, como si de un riachuelo se tratara.
De hecho, cuando se activan los llamados “ciclos de repetición”, sólo se pueden cortar o interrumpir, cuando se han hecho evidentes. Y el truco está en ponerlos sobre la mesa, indagando dentro de tu árbol.
De hecho, Carlos G. Jung, decía que tanto nuestro cuerpo como nuestra alma, se componen de elementos que ya estuvieron presentes en la vida de nuestros antepasados.
Y es que, el hecho de trabajar la individuación, no tiene porqué ser mal vista. No busca destruir el árbol, es en sí mismo un proceso de sanación.
Es salir de lo colectivo, es mirar con objetividad, trabajar y reparar todo lo que esté en su mano. Para luego regresar nuevamente al clan, desde lo individual sanado y evolucionado. Y con el paso del tiempo, ser un ancestro reparador y llevar luz a las futuras generaciones.
Ahora te toca a ti,
Cuéntame conoces tu árbol familiar. Si has fabricado alguna vez tu árbol familiar. Si es grande o pequeño o si has sentido influenciad@ por tu árbol familiar.
Y si quieres saber más, si crees que ha llegado el momento de dar un giro a tu vida.
Te dejo mi “Test Revelador” + “Mi Ebook Sanador para Tu Sistema de Chakras. Para que des, un paso más en tu proceso de sanación y puesta a punto. Únete a «Mi Tribu del Cambio» y muy pronto en tu bandeja de correo, encontrarás tu regalo.
Nos vemos pronto y deseo de corazón que “Todo esté bien en tu Mundo”!
Feliz Jornada.
